hurí - significado y definición. Qué es hurí
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Qué (quién) es hurí - definición

SER LEGENDARIO ISLÁMICO
Huri; Houri
  • Huríes en el paraíso, según un manuscrito persa del s. XV.

hurí         
sust. fem.
1) Seres angélicos que, con la apariencia de bellísimas doncellas, acompañan a los bienaventurados al paraíso, según las tradiciones del Islam. Parecen estar relacionadas con las Walkirias de las religiones nórdicas, pues como ellas acudían en busca de las almas de los guerreros caídos, aunque éstas sólo buscan a los que mueren en la Gihad o Guerra Santa.
2) fig. Mujer de belleza extraordinaria.
Hurí         
Según el islam, una hurí (en árabe, ḥūr o ḥūrīyah; حورية) es una bellísima doncella siempre virgen de cuya compañía gozarán los creyentes en el Janah o Paraíso desde el día del Yaum al-Qiyamah.Corán, sura 52:17-20
hurí         
hurí (del fr. "houri", del persa "?uri", y éste del ár. "?ur al"ayn", las que tienen hermosos ojos por el contraste en ellos del blanco y el negro) f. Nombre aplicado por los *musulmanes a las mujeres hermosas que existen en su paraíso.

Wikipedia

Hurí

Según el islam, una hurí (en árabe, ḥūr o ḥūrīyah; حورية) es una bellísima doncella siempre virgen de cuya compañía gozarán los creyentes en el Janah o Paraíso desde el día del Yaum al-Qiyamah.[1]

Estos seres, que tienen el don de la eterna juventud y están dotados de toda suerte de encantos, simbolizan para algunos musulmanes la eterna bienaventuranza. Los ghilman son los sirvientes hermosos del paraíso destinados a las mujeres.[2]

Según Mahoma, en el Paraíso prometido a los creyentes existen unas bellísimas vírgenes, de las cuales gozarán después de su muerte. Según el Corán, hay huríes blancas, verdes, amarillas y rojas; sus cuerpos son de azafrán, almizcle, ámbar e incienso despidiendo un olor sumamente aromático y llevan sobre la cara descubierta un letrero de oro con expresiones consoladoras. Los que cumplen la ley del Profeta y especialmente los ayunos del ramadán gozarán de las huríes de cejas negras en tiendas de perlas blancas en las cuales hay setenta planchas de rubí, sobre cada una de estas, setenta colchones y sobre cada colchón setenta esclavas, cada una de las cuales está servida por otra esclava. Las huríes visten ropas magníficas tan ligeras y diáfanas que se ve a través de ellas la médula de los huesos. A cada elegido presenta un ángel una pera o naranja en una bandeja de plata. El feliz musulmán abre el fruto y de él sale la hurí que le está destinada, en los brazos de la cual permanece mil años, sin que ella pierda nunca su virginidad.[3]